domingo, 22 de noviembre de 2009

y en el corazón de la semana

Estuve en EL Corral de Alcalá viendo y oyendo a

Francisco J Martínez Morán y a Amalia Bautista

entre humo y sombras.



Un fotógrafo acompañó la lectura de ambos

con el irritante chasquido de su chupa de cuero (o similar) y el clik de su cámara,

así que nos perdimos algunas palabras, quizá esenciales, de los primeros poemas.


(lo que equivale a borrar ciudades en un mapa)



El resto fue estupendo, aunque muy corto, y no supimos si había llegado el final o no,

como siempre ocurre en la vida:

que las historias buenas tienen un fin impreciso.


Como regalo, un poema de Tras la puerta tapiada, que leí sin detenerme y luego estuvo recorriendo mis circuitos reverberantes durante largas horas, cada vez con un sentido distinto:



ANILLOS


SE TRATA de un detalle imperceptible:
los viudos siempre llevan dos alianzas.


.




7 comentarios:

leo dijo...

Qué gran verdad esa de las historias buenas y los finales imprecisos.
Te ha quedado muy poética tu "reseña" poética. Me ha encantado.
Buena semana.

s777 dijo...

Muchísimas, muchísimas gracias. Qué ilusión me hace que te gustara tanto.

¡Gracias!

veridiana dijo...

¡ Qué suerte !
Me pierdo muchas cosas al no vivir en " la capi"...

Y las viudas se cuelgan el anillo en el cuello, con una cadena.

Un beso

Amparo dijo...

Veridiana: ¿Sí?, no me digas, pues no será en mi familia, aquí los hombres no llevan anillo ( y creo que esto se puede aplicar a muchas)

S7: sí, me encantó; no al principio, sino después cuando pensé : dos alianzas, dos, dos. Abrazo.

Leo: sí, muy poetica, así tendría que ser todo: en la panadería, en el taller de reparación de vehículos, en el médico, muy poético.
Saludos y gracias

Caminante dijo...

ENTRO PARA COMUNICARTE QUE HOY he republicado este texto tuyo...

* noviembre 26, 2009. ANÉCDOTA... (+ Amparo)

(Publicado por Amparo en domingo 26 de abril de 2009 en su blog Otras especies oespecies.blogspot.com/.

Una vez, durante una cena, escuché (...)

... hasta pronto. Besos y gracias: PAQUITA

Beíta dijo...

¡Ah!
Yo también estuve...
pero, ¿no nos vimoooos?
:(
¡jopetaaaas!

Es cierto lo del fotógrafo, no sólo sonaba el diafragma de la cámara, se oía cómo colocaban los trípodes...

Amparo dijo...

Beíta:
y sus pasos, y hasta su respiración.
Habría que hacer algo con esto.




(me fui rápido, pero estuve en la puerta media hora larga, no, no te vi ¿has cambiado de aspecto, rubia o algo así?:)