Hace mucho tiempo que nos hemos separado de las máquinas. Nuestra relación ya no es la misma. Han pasado de ser un apéndice nuestro a dictarnos cuál debe ser nuestra conducta. A mirarnos mal. A ocupar nuestro territorio imperceptiblemente. Un espionaje velado. No me refiero a los robots ni nada de eso sino a cosas más pequeñas. Casi invisibles. Pero creo que nadie se ha dado cuenta aún. Desde luego, estamos menos solos, pero con una compañía de dudoso objetivo.
(continuará...)
(continuará...)
2 comentarios:
gUaU!!! gRaNd3!!!!
Me encanta: no dejes de seguir.
Beso fuerte.
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